Nace un 10 de Agosto de 1941, cuando el alba pintaba el agreste paisaje de la salitrera María Elena, despertaba así a la vida un hombre lleno de sensibilidad, de letras y profundos ideales.
Inicia sus estudios en la Escuela Básica de la mencionada salitrera y es ahí en donde escribe sus primeros trabajos literarios. Luego emigra a la ciudad de Antofgasta donde cursa hasta su Educación Media, más tarde se radica en la localidad de Ovalle donde realiza estudios de Técnico Agricola egresando en 1963.
Su vida laboral comienza en la E.C.A. (Empresa de Comercio Agricola) es en esta epoca cuando su veta literaria vinculada a la prosa y poesía forma parte de su día a día debido a su trabajo en terreno, el que le permite desarrollar su sensibilidad la que va plasmando en las hojas de sus cuadernos que siempre le acompañaban.
Hoy se encuentra radicado en la comuna de El Bosque y su pluma no descanza, diariamente su rojo corazón le dicta aquellas sesaciones que dan forma a su emotiva prosa romantica o aquella contestaria.
Hasta la fecha cuenta con dos publicaciones "Antología Criolla de mi Tierra Latina" (1997) y "Los Sonetos del silencio" (2000) y además un vasto material escrito que esta cobijado en su escritorio, inedito debido a la indiferencia de quienes podrian auspiciar sus ediciones.
La presencia del amor de su vida , Jovita (QEPD) siempre ha ocupado un importante sitial en su creación, le canto a su temprana partida, le canta a sus recuerdos, a esas sentidas evocaciones que se graban en cada palabra de su prosa nostalgica.
En la actualidad es resposanble del crecimiento de su hijo Gioser , unico hijo de su matrimonio, con quien vive y comparte el amor por las letras pues este joven adolescente a sus tempranos 14 años ya cuenta con logros en el arte de la poesía.
PUNTA COLORADA (*)
Punta Colorada, en la agonía te consumes de sed y soledad,
el viento gime y rezonga, como un trastorno cruel,
cae tu sonoro en mis oídos, y me enreda la impaciencia,
entonces sopla un aire cálido, en mi cara conmovida;
crecerá mi descontento, y mi existencia estéril caerá,
mis huellas de adolescente ¡no vi! las borro el el tiempo,
se atravesó una sonrisa, ocultando mi llanto breve,
observando las telarañas, entrepensando en los años idos;
se me escapo una lagrima injertada, de antepasados recuerdos,
de la ventana de mis océanos empañados, veo tu vestimenta,
cobijado de polvo desaliñado, como pávido de todo.
…..
Y no quiere volver atrás su influencia, en su andar va ocultando las heridas,
que el tiempo marcada le dejo, y que jamás se borrarán;
y yo vengo en tus lamentos desvelados, queriéndote amparar,
al viento interrogué buscando una razón, pero este no me contestó,
y guardando mi nostalgia, empecé a resumir, hablando conmigo mismo,
pero todo lo que mis ojos miran, esta inmóvil seco y cubierto de miserias,
entonces me pare sobre las ruinas, llenas de añoranzas bajo el sol,
y anduve sobre las ruinas pisando el polvo , y su paisaje mirando,
y donde pisaban mis pies, las viejas ruinas se quejaban echando espanto,
se asustaban, despertando de su sueño insostenible, y desdichado;
y donde andaba, iba dejando mi huella atrás, pero estas no querían quedarse solas,
entristecidas como en silencio me gritaban, que no las deje que volviera,
y sentía que me hablaban en voz baja, como temerosas, y llorando de penas,
me sujetan unas manos invisibles, y unos brazos intranquilos me abrazan;
y me piden que no me vaya todavía, pero es tarde y tengo que volver,
me ruegan y me dicen pensativas, que vuelva otra vez.
Fragmento de “Vengo de la Pampa” (1999)
(las obras publicadas , del autor, se pueden adquirir en calle San Diego Nº 41)